Las Contracciones Braxton Hicks

Cuando las mujeres quedamos embarazadas por primera vez, nos embriaga una enorme ilusion, pero tambien nuestra cabeza está llena de dudas. 
Una de las dudas es que el bebé venga sanito, despues la icógnita de saber el sexo del bebé y por último nos preguntamos.... como podemos saber y reconocer con exactitud los dolores de parto?
Seguidamente vamos a darte a conocer las llamadas contracciones Braxton Hicks.

¿Cómo podemos saber si son las contracciones de Braxton Hicks o son contraciones del parto?
Ante esa duda lo que deben saber es que las de Braxton Hicks no son tan dolorosas cocmo las contraciones de parto, tampoco se repiten con la regularidad y frecuencia que las contraciones de parto, éstas contraciones son muy intensas y van aumentando en dolor y cada vez mas seguidas repitiéndose a los dos o tres minutos y llegando a durar hasta minuto y medio. Tu bebé está a punto de nacer.

¿Cómo soportar sus molestias?
Según va avanzando el periodo de embarazo, las contracciones de Braxton pueden ir aumentando las molestias que causan en la mujer, quien puede sentirse realmente incómoda. Por eso... lo mejor que puede hacer cuando se dé esa situación es llevar a cabo algunos de los consejos.

Cambiar de postura.
Así, si se está de pie o sentada, lo mejor es tumbarse en la cama o en el sofá para intentar relajarse. Otras madres prefieren salir a caminar, o darse un relajante baño.
Hay que tener en cuenta que si estas algo deshidratada.... tienes mas posibiliadades de que te den estas contraciones, por este motivo lo mejor es beber agua, ya que si este es un motivo al beber agua las contaciones cesan rapidaemnte.
Si estas asistiendo a clases de preparacion al parto.... con seguridad que te darán algunas tecnicas mas para reducir las molestias y sobretodo los ejercicios de relajación.

¿Acudir al médico?
Como ya sabemos..... las contracciones de Braxton Hicks son muy habituales a partir del segundo trimestre de embarazo y ya sabemos que se diferencian claramente de las contaciones de parto.
No obstante, hay ocasiones en las que debes de acudir al hospital de manera inmediata porque algo indica que no va bien. 

Algunos casos son:
Cuando antes de la semana 37, las contracciones son muy intensas, dolorosas y demasiado regulares. En concreto, cuando se repiten más de cuatro veces en una sola hora.

Cuando hay sangrado vaginal.
Asimismo hay que acudir al hospital cuando se produce la comprobación de que se están produciendo fugas de lo que es el líquido amniótico. Esta situación podría estar provocando el  sufrimento fetal.  
Tiene la sensación de que el pequeño está intentando salir y se encuentra presionando lo que es la pelvis de forma clara.
Ha aumentando la cantidad de lo que es el flujo vaginal o este ha cambiado su apariencia, o espesa.

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